El Ritual de la Penitencia propone dos guías para un examen de conciencia. Una, a partir de los Diez Mandamientos; la otra, desde la enseñanza de Jesús en el amor a Dios y al prójimo.
Respondiendo algunas preguntas, a partir del Decálogo, fácilmente se puede tomar conciencia de aquellas acciones u omisiones que nos han apartado de Dios: